Un Escape Room es un juego donde estás encerrado en una habitación con un grupo de personas y deberán resolver una serie de enigmas, retos y acertijos (por lo general con una historia que le dé significado) para poder encontrar la llave de la puerta y salir antes del tiempo asignado. Aquí te explico cómo hice uno en casa.
Esto lo hice para el cumpleaños de mi hijo, la idea era llevarlo a un lugar que se especializa en eso pero le tocó en plena cuarentena 2020 y como estábamos encerrados en la casa y no quería que fuera un día igual a los demás me puse manos a la obra.
Quiso que su tema de cumpleaños fuera Doom, un juego de 1993 que está ambientado en el infierno, así que decoré uno de los cuartos, puse una mesa de botanas y bebidas y una para el pastel y la compu para que saludara primero a sus tíos y primos por zoom.
Como sabrán para mí es muy importante la tarjeta y ya había pasado la invitación por whatsapp con la hora para que se conectaran a la "fiesta" por zoom.
También tenía muy organizado en una pizarra que además era decorativa el programa de lo que íbamos a hacer.
MATERIALES PARA HACER EL ESCAPE ROOM:
Cuadritos de papel o cartulina
Lápices, marcadores
Llaves y candados
Cuerda
Linterna por si hay que buscar en lugares oscuros
Hoja con código morse o algún código de letras oculto
Libreta y lápiz
Una tarjeta de comodín por si se trancaba podían hacer una pregunta
USB
Compu o laptop opcional para abrir el USB con la pista.
En ese mismo cuarto al anochecer iba a tener lugar el Escape Room. Como era el infierno, puse un papel rojo de china tapando el bombillo para que la luz se pusiera más tenue y roja.
Ya tenía todo listo y escondido desde temprano, lo primero que hice:
1. REGLAS DEL ESCAPE ROOM:
A) Poner todo junto lo que iban encontrando.
B) Seguir el orden numérico de las pistas
C) Es un juego de grupo, deben escucharse entre todos y aportar soluciones.
D) la tarjeta comodín sólo la podían usar una vez, así que tenían que echarle ganas.
2. Escribir las tarjetas que iba a esconder, la primera iba a estar a la vista y una cosa tenía que llevar a la otra, en un orden estricto. Esta tarjeta decía que unos zombies los habían mordido, de hecho antes de que la encontraran lo primero los hice que se "durmieran y no despertaran por nada" los moví, empujé y arañé suave con tal de disimular las marcas que aproveché de hacerles con un marcador rojo, con forma de mordidas o arañazos de zombie, esta parte era para morir de risa...
3. La primera tarjeta decía que se fijaran en toda la habitación y medio escondida pero si se veía otra tarjeta que decía que tenían 45 minutos para escapar de la habitación y conseguir el antídoto que estaba afuera. Aqui un toque bueno es colocar un líquido en algún recipiente interesante para que sea el antídoto anti zombie.
Esta tarjeta tenía la primera pista que era un acertijo: un ejemplo la respuesta era "cama" y abajo estaba una caja con pistas, (hay muchas maneras de hacerlo, esta se me hizo más fácil) cada una con un número y otros objetos que no tenían sentido (todavía)
4. La tercera tarjeta tenía una llave y una pista para buscar en otra parte del cuarto: aquí, la siguiente pista tiene que estar cerrada con un candado.
5. Las siguientes tarjetas cada una llevaba a una pista que de principio a veces no sabían para qué era, pero les dije que fueran poniendo todo junto, era una de las regla que les dije al principio. Tenían alguna figura por ejemplo: en la caja había un rollito de papel de baño con una figura, luego otra de las pistas encontraron una tira de papel muy larga con la misma figura y tenían que deducir que había que enrollar la tira para que se formara una nueva pista que era otro lugar donde buscar por ejemplo "persiana" entonces en la persiana atrás pegada estaba un usb.
6. En el usb puse un codigo QR que tenían que leer en la compu, puede ser de lo que quieras yo les puse de un programa que se llama "idiotizer", lo tenían que instalar y usar y es muy cómico. Esto fué nada más para hacerlos perder un poco de tiempo.
La última pista por supuesto tiene que llevar a la llave de la puerta para salir y acaba el juego.
Estuvo perfecto porque era el cumpleañero, su hermano y su papá, se entretuvieron un rato diferente, se divirtieron y compartieron juntos lo que de otra manera hubiera sido un día normal de cuarentena cada quien por su lado. Mi hijo que es un niño muy exigente y sincero, le encantó y me dijo que fué el mejor cumpleaños.
Así que valió la pena el trabajo, porque para eso nos esforzamos las mamás, para hacer felices a nuestros hijos y hacerles pasar momentos inolvidables y especiales.